
Forcejeamos durante un rato hasta que finalmente se dio por vencida, se aparto de mi con la ira aun dibujada en su mirada, - yo también me alegro de verte querida – mientras en mi rostro se dibujaba una sonrisa sarcástica, Riadna había sido, aun era, una mujer realmente hermosa, recuerdo cuando la vi por primera vez, mis ojos se clavaron en ella y durante un largo periodo de tiempo cada vez que cerraba los ojos allí estaba ella, su sonrisa seductora, su larga melena dorada y su cuerpo danzaban en mi imaginación invitando a la lujuria, se fue metiendo dentro de mi hasta convertirse en una obsesión, sabía que antes o después acabaría siendo mía. Aun no entiendo bien como, pero ella conseguía resistirse a la atracción que un mortal siente por un vampiro, he de reconocer que ese detalle hacia la caza mucho más interesante. Empecé a perseguirla, conseguí hacerme inseparable de todos los que para ella eran importantes, familia, amigos, pero ella seguía resistiéndose. Hasta que me canse de esperar, me cole en su alcoba una noche de verano, la brisa suave que entraba por la ventana mecía con mimo sus cabellos dorados, no tenía intención de forzarla pero aquella visión despertó a la bestia, la tome y después tome también su vida.
Eres buena creando tensión....
ResponderEliminarPaso sólo a saludarte, Pasión. De momento. Y a decirte que en este mundo de benditos locos, todo es un perfecta simbiosis, pues siempre podremos aprender algo de los demás.
ResponderEliminarAsí que aprovecharé también mis próximas visitas para impregnarme a gusto y con tiempo de tus sentires (tenebrosos y sensuales) todo lo que tú me permitas... Intuyo que tu creatividad dará mucho de sí. Y todo bueno.
Besos.
Nota: alabo con gusto la mayoría de las películas de tu perfil.